En Procomo nos explican qué es la arquitectura bioclimática

A la hora de construir un edificio, es fundamental tener en cuenta las condiciones del clima, para así sacar todo el provecho posible de las energías naturales, principalmente la del sol. De ello nos hablan desde la constructora madrileña Procomo, donde van a explicarnos en qué consiste y todo lo que tenemos que saber sobre la arquitectura bioclimática.

La arquitectura bioclimática, una opción para sacar el máximo provecho a la energía del sol

En Procomo nos explican que las casas pasivas o de consumo casi nulo son el mejor ejemplo de edificación sostenible y ecofriendly que tenemos en la actualidad, con independencia de que tengan el certificado Passivhaus o no. Se trata de una tendencia que está alcanzando una popularidad creciente, sobre todo en los países de Europa Central.

Hablamos de arquitectura bioclimática para referirnos a aquella en la que se tienen en consideración las características del clima a la hora de diseñar los edificios. De esta manera, estos pueden obtener el máximo provecho de los recursos naturales en su funcionamiento, creando un ambiente confortable en el interior de la vivienda. Esto tiene, además, una doble ventaja: se reduce el impacto en el medio ambiente y el consumo energético del edificio.

Por esta razón se habla de casas pasivas, ya que el edificio, de manera pasiva y por su propio diseño, puede mantener las estancias de la vivienda calientes en los meses de invierno, reduciendo igualmente el calor en verano.

Cabe destacar que el sol, la lluvia, la vegetación y el viento son los principales recursos de la naturaleza que la arquitectura bioclimática tiene en cuenta.

¿Es tan moderna la arquitectura bioclimática como parece?

Desde Procomo nos explican que en realidad, no lo es. En principio puede parecer un concepto de hoy en día, pero las clásicas casas encaladas de Andalucía o los tejados inclinados en dirección al sur del norte de Europa son muy buenos ejemplos de cómo la arquitectura bioclimática lleva mucho más tiempo del que podríamos pensar entre nosotros.

Este tipo de construcciones nos hacen ver que las personas han sabido siempre cómo adaptar sus viviendas a las condiciones climáticas.

¿Cuáles son las estrategias de la arquitectura bioclimática?

La principal fuente de energía con la que cuenta la arquitectura bioclimática es el sol. De ahí la importancia de tener en consideración la incidencia que tiene su trayectoria sobre la vivienda, o bien a lo largo del año, ya que la radiación del sol no es la misma en verano que en invierno.

Durante el invierno, el sol permanece bajo incluso cuando llega a su punto más alto. Por esta razón, la fachada del sur recibe casi toda la radiación. Por otra parte, en verano, al mediodía el sol llega un punto más vertical de la vivienda, afectando sobre todo a su cubierta, y a las fachadas de los lados por la mañana y también por la tarde.

Pues bien, en Procomo nos explican que la arquitectura bioclimática acumula y redistribuye la energía del sol de forma de calor. Lo hace gracias al efecto invernadero, a través del cual, la radiación solar traspasa el vidrio y calienta los materiales que se encuentran al otro lado de este, no pudiendo escapar.

De esta manera, mantiene el calor dentro de la vivienda y lo distribuye por la misma, jugando tanto con la ventilación como con el peso del aire según su temperatura (ya que mientras que el aire caliente sube, el frío baja).

Por esta razón, en términos de arquitectura bioclimática, resulta de vital importancia orientar las terrazas cerradas y las ventanas hacia el sol. También es interesante añadir un espacio invernadero en la fachada sur, por ejemplo.

En verano se busca lo contrario, no retener el calor. Por ello, en la arquitectura bioclimática se utilizan técnicas como el sombreamiento para evitar la radiación del sol.

Como ya comentamos anteriormente, la arquitectura bioclimática cuenta con más fuentes naturales de energía además del sol, aunque esta es la más relevante. Por otro lado, igualmente importantes que la superficie de captación o la orientación de las ventanas a la hora de diseñar estos edificios son el aislamiento de la envolvente, la ventilación, etc.

¿Cuáles son las características de la arquitectura bioclimática?

El principal aspecto en común es la adaptación a la temperatura, que se da en proyectos bioclimáticos basados en aspectos y técnicas que están conectadas entre sí al mismo tiempo por diversos métodos, tales como la ventilación cruzada, la orientación, la protección solar, el soleamiento y el aislamiento térmico basado en técnicas y utilización de materiales.

La arquitectura bioclimática implica un diseño integral de una vivienda, de un conjunto de edificios, etc. con soluciones adaptadas y que se puedan cambiar según las condiciones climáticas del lugar, proyectándose desde el primer momento en el proyecto que se va a edificar.

Para llevar a cabo la adaptación es necesario que la obra y la construcción puedan variar su comportamiento ambiental, gracias a soluciones térmicas totalmente distintas para las condiciones del invierno y del verano.

¿Cuáles son las ventajas de la arquitectura bioclimática?

En Procomo destacan las siguientes ventajas de la arquitectura bioclimática:

• Se ahorra en consumo, gracias a una gestión más eficiente de la energía y a su integración con el medio.
• Permite la reducción de la huella de carbono, dado que se minimizan las emisiones de gases de efecto invernadero y de la huella hídrica (gracias a la optimización del consumo de agua).
• El confort térmico es óptimo, ya que se mantienen temperaturas constantes con independencia del momento del año y de las condiciones del clima.
• Los hábitos de vida sostenibles mejoran, porque se consigue un uso racional de los recursos, entre ellos la energía.
• Es una clara apuesta por la innovación, en la medida en que se utilizan las energías renovables, instalaciones como la aerotermia, etc.

El uso de materiales aislantes permite que se reduzca la contaminación acústica.